A lo largo de los años, han pasado por mis clases muchos padres de niños pequeños y medianos, padres orgullosos de que a sus hijos les gustara pintar y dibujar, y les apuntaban a las clases como complemento de su formación. Pero los años pasaban, y los niños se transformaban en adolescentes. Aproximadamente 3 de cada 4 abandonaban las clases entre los 11 y los 14 años. Otros intereses, estudios muy duros, salir por ahí, y también, padres que ya no consideraban tan interesante que sus hijos siguieran entusiasmados con la idea de dibujar y pintar a todas horas, con todas las cosas “importantes” que debían hacer para ganarse la vida.
Pero algunos alumnos permanecían en las clases, y otros se apuntaban con 15 o 16 años, todos estos sin excepción tenían algún plan de ganarse la vida dibujando o pintando. Algunos soñaban con dibujar comic, otros con pintar obras que se vendieran por millones…
Pero, salvo honrosas excepciones, todos tenían algo en común, al menos uno de sus progenitores estaba realmente muy preocupado por la fijación de sus hijos en querer dedicarse a algo tan poco rentable, tan poco práctico como esto de pintar “monas”.
Padres y madres venían pidiendo que mediara e hiciera entrar en razón a sus hijos. Que les explicara que ésto de dibujar y pintar es un pasatiempo, no un modo de vida.
Como comprenderéis, yo no podía hacer nada parecido.
Al contrario, me sentaba con ellos y empezaba explicarles esto:
En el mundo laboral, las artes gráficas son tan necesarias que si dejara de haber nuevos artistas durante tres años, es probable que muchas grandes empresas tendrían que cerrar.
Hay muchas salidas laborales para alguien con talento gráfico por ejemplo:
– Cine: la industria de animación necesita cada vez más artistas gráficos, hay una demanda mundial enorme de series y películas de animación. Son trabajos muy bien pagados, por cierto.
– Publicidad: Desde el más simple retoque fotográfico hasta el diseño de imagen de marca, campañas, diseño de productos de todo tipo.
– Industria y arquitectura: Estudios de ingeniería y arquitectura contratan y necesitan de delineantes (un tipo especial de dibujante técnico) y diseñadores graficos para un sin fin de actividades.
– Por supuesto: Comic de todo tipo y estilo.
– Ilustración: desde libros de texto a literatura infantil que es la que más se produce, la más cara y la que más se vende en todo el mundo.
– y cómo no: Arte como tal: Retratos y cuadros en general se venden cada día, para regalos, para decoración de alta y baja gama, etc.
-Enseñar dibujo y pintura…
Como ven, les decía a aquellos padres preocupadísimos, hay muy pocas cosas a las que su hijo pueda dedicarse que tenga más salidas laborales en una misma profesión. Es cierto que vivir “del arte” es distinto que otras profesiones. Requiere una mente abierta, saber adaptarte a lo que el mundo pide de ti.
En ese momento, me volvía al hijo/a y les decía lo siguiente (o más o menos):
Si te limitas a querer dedicarte a pintar cuadros, podrás ganarte la vida, pero te costará arrancar, y hay gente que no lo consigue nunca. Pero si quieres aplicar tu talento y usarlo como medio de vida, tienes muchos campos donde hacerlo. El mundo necesita siempre artistas gráficos que “sepan un poco de todo”.
Si de verdad quieres dedicar tu vida a la expresión gráfica tendrás que aprender muchas técnicas, el uso de programas de diseño digital, y tomarte muy en serio que toda tu vida serás tanto un profesional, como un estudiante, porque en el momento que dejes de formarte te quedarás atrás.
Habrá épocas con mucho trabajo y muchos ingresos, y otras con menos. Tendrás que aprender a administrarte, a guardar cuando ingreses mucho para tener cuando ingreses poco.
Mucha gente no te comprenderá, y algunos pensarán que estas loco/a por querer dedicarte a esto. Para conseguirlo tendrás que hacerte fuerte y trabajar duro.
¿Estás de verdad dispuesto a ésto? ¿no preferirías una profesión con menos complicaciones?
En este punto, la mayoría (como buenos adolescentes) estaba muy seguro de que sí, que podía con ello y más. Luego, con el tiempo algunos cambiaron de idea, y otros siguieron adelante. Estos últimos “viven del arte”, os lo aseguro. Porque sí se puede vivir como artista gráfico. Habrá quien gane más y habrá quien gane menos, hay muchos factores que influyen en un sentido u otro y eso es otra conversación.
Pero, si estás leyendo esto, y estás en un punto de tu vida que quieres saber qué dirección tomar, te digo lo mismo: Puedes vivir de ello, no lo dudes jamás, pero tendrás que hacer todo lo que mencioné antes. ¿estás dispuesto a ello?